8 de agosto de 2011

El próximo gobernador, la ciencia y el ambiente


Dos pedidos claros para José Manuel De la Sota:

Hugo Maccioni - Director de Conicet Córdoba
“Córdoba tuvo al Conicor como modelo de promoción de la ciencia y la técnica, con exitosos programas de becas y mínimos recursos para administración. Cuando asumió José Manuel de la Sota, creó la Agencia Córdoba Ciencia, con una gran estructura administrativa pero escaso impacto en el desarrollo de la ciencia y la técnica. Juan Schiaretti la elevó al rango de ministerio, con una jerarquización de la actividad. Espero que el próximo gobernador mantenga el ministerio y asigne más fondos, para que su impacto en el desarrollo de la ciencia sea relevante.”

Raúl Montenegro - biólogo, Premio Nobel alternativo 2004
“El gobernador electo debe asumir que la Ley del Ambiente 7.343 y su decreto sobre evaluación de impacto ambiental están para ser cumplidos. Esto haría que no debamos presentar denuncias penales cada vez que un funcionario omite su cumplimiento. Además, le pido que mantenga caudales ecológicos en los cursos de agua, para sostener la biodiversidad; que impida que se extienda la vida de la central nuclear de Embalse por 25 años; que prohíba por ley la aplicación de todo tipo de plaguicidas en una franja de 800 metros alrededor de todo asentamiento humano; que derogue la ley de bosques nativos y la reemplace por una norma que proteja los intereses de la provincia y sus habitantes; que proteja la vigencia de la ley que prohíbe la minería metálica a cielo abierto y la nuclear, y que prohíba la incineración de residuos.”

17 de mayo de 2010

Tierra que tiembla

“Donde ha temblado, volverá a temblar”. Esa frase fría y amenazante, dicha por un especialista, es la que cierra el trailer del documental Sampa Pacha, tierra que tiembla. Se trata de la historia (con testimonios y recreaciones de época) del terremoto que el 11 de junio de 1934 afectó a la localidad de Sampacho, al sur de la provincia de Córdoba.
Sin víctimas fatales, pero un pueblo totalmente destruido, el impacto psicológico se tradujo en una importante migración de sus habitantes. Los titulares de la época hablaban de que el paraje iba a desaparecer. El blog Retro recuerda que La Voz del Interior tituló en su momento: “¡Sampacho, pena del destino!”.
Este miércoles 19, a las 18.30 y a las 20.30, el documental se proyectará en el Cine Club Municipal “Hugo del Carril” (San Juan 49, ciudad de Córdoba). El 27 de mayo, a las 21, se emitirá en el cine Plaza de Río Cuarto. Más detalles del documental en su página oficial.



Que pasaría si...

Los sismos de Haití y Chile parecen distantes en el tiempo luego de que pasó el otro temblor, el mediático, siempre obligado a magnificar todo. (Hay una máxima que dice que si hubo un asesinato en X lugar pero lo vemos 10 veces durante un día por la tele, sensación es que murieron 10 personas).
La ubicación de Córdoba en el mapa sismológico no es ni la mejor ni la peor. Los especialistas coinciden en que un sismo de magnitud 6 en la escala de Ritcher es posible que suceda, aunque no saben cuándo. Las zonas sísmicas se clasifican del cero al cuatro. La ciudad de Córdoba está localizada en una zona uno, de riesgo reducido, mientras que el sector oeste de la provincia está en zona dos (riesgo moderado).
La diferencia con Chile y Haití es que Córdoba no está ubicada en una zona de “unión” entre dos placas tectónicas. En eso lugares las presiones que se ejercen entre ellas, en algún momento se disparan de golpe, como un resorte, y sucede la catástrofe. Las fallas del territorio cordobés son intraplacas, con presiones menores. La palabra de los especialistas, en esta nota de La Voz del Interior.
Sobre las construcciones antisísmicas en Córdoba y su control, basta una cita del arquitecto de la UNC, José Luis Gómez: "Construimos muy mal. No se respetan las reglamentaciones. Esto no ocurre por falta de dinero, sino por desconocimiento y falta de control. Acá nadie cree que un sismo fuerte pueda ocurrir".
Donde ha temblado, volverá a temblar.

14 de mayo de 2010

La UNC hace sinapsis

¿Por qué nos emocionamos al leer un libro? ¿Dónde está el comando que regula nuestra presión arterial? ¿Cómo funciona nuestro reloj biológico? ¿Cómo podemos simular la mente en una computadora? ¿Cómo se forman nuestras neuronas?
Muchas preguntas y muy variadas para que puedan responderse desde sólo un rincón de la ciencia. La mente es tan compleja como apasionante es descubrir la mínima pista de cómo funciona. Al cerebro hay que rodearlo desde todas las disciplinas para que confiese lo que esconde.
Ése es el objetivo del nuevo Doctorado en Neurociencias de la Universidad Nacional de Córdoba. Es el primer del país y uno de los primeros de América latina (hay uno en Chile y otro en Bolivia dictado por españoles).
Las neurociencias son un conjunto de disciplinas que estudian algún aspecto de la estructura o función del sistema nervioso. Sostiene que cualquier conducta puede explicarse en términos de actividad cerebral.
Los dos primero párrafos de este post pertenecen a una nota que publiqué hace un año en La Voz del Interior con un título que me gustó mucho: “Cerebro estás rodeado”. Y otra: “Disección mental”. Habla sobre los jóvenes investigadores de Córdoba que estudian el cerebro. Pasen y lean.
Para conocer más detalles de la carrera, ingresar a la página del Doctorado.

8 de mayo de 2010

Satélites con tecnología de Julio Verne


La frontera entre ciencia y ficción cada vez es más difusa. En De la Tierra a la Luna, Julio Verne cuenta como un grupo de astronautas llegan a nuestro satélite, disparados por un cañón. Fue escrito en 1865.

Ahora un grupo de investigadores cordobeses estudia una tecnología similar a la imaginada por Verne para colocar en órbita nanosatélites. Sólo que el combustible del cañón no será pólvora sino electromagnetismo. Es la misma tecnología que se utiliza en los trenes maglev, sólo que para el cañón el impulso es más brusco.

“Llega a siete mil metros por segundo (25.200 kilómetros por hora). Una bala de rifle alcanza los mil metros por segundo (3.600 kilómetros por hora)”, explica Eduardo Zapico, director del proyecto (que realizan en conjunto con un grupo alemán).

Pero esto tiene sus consecuencias para la “bala”, pues hay que lograr que el nanosatélite no se fracture, deforme o sus circuitos sean afectados. Una descripción sobre el proyecto se puede leer en esta nota que realicé para La Voz del Interior.

Insisto, la frontera entre ciencia y ficción cada vez es más difusa. No sólo lo digo yo. Lo dice Michio Kaku, un físico representante de esa alocada teoría de las cuerdas que quiere convertirse en una “teoría del todo”. Kaku es un gran divulgador que se anima a más. Una prueba de ello es su libro Física de lo imposible. “El 80% del cine de ciencia ficción será una realidad dentro de un siglo”, dice en esta entrevista al diario El Mundo. Curiosamente, allí menciona la tecnología maglev. En el video de arriba, nos habla de la vida extraterrestre y sus posibles tecnologías.

Recomiendo el libro no sólo con un ejercicio placentero y curioso, sino también como una reflexión filosófica. Me resulta increíble pensar que haya otras dimensiones y universos paralelos sucediendo ahora mismo; o que alguna vez podamos viajar en el tiempo, o que podamos viajar a otra galaxia. Es verdad que la realidad supera a la ficción, pero lo bueno de la ficción es que no debemos esperar a que suceda.

29 de abril de 2010

El ojo de la tierra estará al frente de Tolar Grande

Hace un año y medio les contaba como un grupo de astrónomos cordobeses estudiaban la zona de Tolar Grande, en la Puna salteña, con el objetivo de que allí se instalara el telescopio más grande del mundo.

Finalmente, Argentina quedó afuera de la competencia. La disputa estaba entre Chile y España. Ganaron los vecinos transandinos. El sitio elegido por el Observatorio Europeo Austral (ESO) es Armazones. Lo curioso es que está "al frente" de Tolar Grande (en la imagen de arriba), a 290 kilómetros hacia el oeste.

La opción chilena se impuso a Roque de los Muchachos en las islas Canarias (España), el segundo favorito. Las razones son que Armazones tiene cielos más despejados y construirlo allí costará 25 millones de euros menos y varios millones anuales menos para operarlo.

Esta última fue una de las principales razones por la que el cerro Macón (Tolar Grande) fue excluido de la competencia. Diego García Lambas, astrónomo cordobés del Instituto Astronómico Teórico y Experimental (Iate) y responsable del proyecto en Argentina, asegura que en Macón las características del cielo son similares a las de los sitios chilenos. “El sitio no es significativamente mejor que el chileno, si no, nos hubieran elegido. Pero ESO ya está instalada en Chile, lo cual les ahorra mucho dinero”, dice.

Ocurre que Armazones está muy cerca de Paranal donde funcionan otros telescopios de la ESO, lo cual significa un importante ahorro en logística. El Telescopio Europeo Extremadamente Grande (E-ELT, del inglés) tendrá un espejo de 42 metros de diámetro. Su puesta en marcha será en 2018 y tiene por objetivos detectar planetas extrasolares y explorar los elementos más antiguos del universo. Su costo roza los mil millones de euros.

Sin embargo, al participar del proyecto, la astronomía nacional logró un acontecimiento único en su historia del que formó parte un grupo de investigadores cordobeses. Por primera vez se caracterizó astronómicamente un sitio para la instalación de un telescopio. “No se hizo ni en Bosque Alegre (Córdoba) ni en El Leoncito (San Juan). Tenemos información meteorológica y de calidad de cielo sistematizada. Además, sabemos que es un lugar tan bueno como el de los chilenos, en donde están los mejores telescopios”, explica García Lambas.

El grupo de investigadores logró una fuerte comunión con la comunidad local de Tolar Grande, quienes se entusiasmaron con el proyecto. El objetivo del Iate ahora es colocar un telescopio menor para aprovechar la calidad de cielo y explorar el universo. Pero además convertir el lugar en un punto de turismo científico.

“Ya tenemos el dinero para comprar una cúpula de ocho metros con fondos nacionales. En 2010 estará instalada. La idea es atraer fondos nacionales e internacionales para colocar un telescopio de 1,5 o dos metros”, comenta García Lambas.